Un verdadero drama se desató esta tarde cuando a eso de las 15,00 horas, Máximo, un niño de 5 años que se encontraba de paseo en el parque acuático Antú de Quillón, cayó a la piscina de adultos y cuando fue rescatado tenía débiles signos vitales.
De inmediato fue trasladado al hospital de Bulnes en una ambulancia del consultorio de Quillón y escoltado por radiopatrullas de Carabineros de la Subcomisaría de esa ciudad.
Una vez en el hospital comenzaron las maniobras de reanimación, pero nada dio resultado y el niño falleció en la sala de urgencia del hospital de Bulnes.
En el intertanto comenzaron a llegar los familiares del niño que era originario de Cabrero y se encontraba de vacaciones en Quillón en casa de un familiar.
A las 16,10 horas, los familiares fueron informados por el médico de turno en el servicio de urgencia del hospital de Bulnes, que el menor había fallecido, generándose una situación difícil de describir a causa del llanto y recriminaciones de los familiares, que no dejó indifirentes a nadie de los presentes.
A eso de las 14,40 horas llegó la mamá del niño, la que venía escoltada y solo sabía que su hijo estaba hospitalizado. Cuando el médico le comunicó su deceso, se produjo otro momento muy complicado.
El cuerpo del niño será derivado al servicio médico legal de Chillán para la autopsia correspondiente.
Publicado a las 17,00 horas.