Con un despliegue inusual de funcionarios de Gendarmería se llevó a cabo el traslado al hospital local de 9 internos de la cárcel de Bulnes que al momento del desencierro presentaron molestias gastrointestinales, fiebre y deshidratación, producto de haber consumido la noche anterior alimentos a los que les faltaba cocción.
Del total de 19 internos que presentaron problemas estomacales, 9 fueron derivados al hospital de Bulnes donde recibieron los primeros auxilios y los otros 10 restantes fueron atendidos en la enfermería del penal.
Al momento del cierre de esta edición, los internos reposan en cama mientras a algunos le son administrados medicamentos.
elvecinal.cl se entrevistó con el jefe del penal Capitán Gonzalo Monzón Peña, quién confirmó lo ocurrido y nos hizo entrega del comunicado que sigue a continuación:
