Al mediodía visitamos la toma del Colegio Teresa de los Andes por parte de padres y apoderados del establecimiento, en protesta por el despido de 7 profesores y el traslado de otros, incluidos asistentes de la educación, lo que haría un total de 14 personas.
Mientras la madres se dirigieron a preparar el almuerzo para esperar a sus maridos y los hombres se encontraban en sus trabajos, un grupo de jóvenes eran los encargados de vigilar que la toma del establecimiento se mantuviera.
Por su parte los profesores del establecimiento se mantienen en las afueras del colegio a orillas del camino, algunos tomando café, otros jugando cartas y otros en el interior de sus vehículos, haciendo presencia laboral, ya que no desean que la fundación los despida por abandono de labores, por lo que ayer y hoy confeccionaron una carta de asistencia con el nombre de cada profesor y su firma, la que harán llegar a quienes corresponda.
En conversación con el Presidente del sindicato de profesores del colegio Jorge Cifuentes, nos informó que nos harán llegar un comunicado donde clarifican la situación de ellos, con la finalidad que la comunidad se informe de los hechos. Su presencia en el lugar obedece a que ellos estaban mandatados para realizar el proceso de matrículas de los alumnos los días de ayer y hoy, proceso que no se ha podido llevar a cabo por la toma del colegio.
Por su parte el Presidente del centro general de padres y apoderados del colegio Sergio Bocaz, nos informó que a las 17,00 horas de hoy, en dependencias de la Parroquia Santísima Cruz de Bulnes, se realizará una reunión entre la Fundación, el centro de padres y profesores, con la finalidad de buscar una solución a la toma.
GRAN CANTIDAD DE PÚBLICO COPÓ DEPENDENCIAS DE BANCOESTADO
Como último día bancario del año 2014, los usuarios de Bancoestado coparon las dependencias y durante toda la mañana se vio una gran fila que sobresalía varios metros hacia la calle Palacios.
Lo mismo ocurría con los cajeros automáticos que durante toda la mañana había que hacer una fila para poder sacar dinero.
Las cajas vecinas tuvieron su día y al mediodía ya no contaban con dinero para girar, quedando solo el recurso del vuelto en el supermercado unimarc a los que pagaban con tarjetas.